Refacciones en el inicio el ciclo lectivo
El trabajo docente, con toda su carga de pasión y de esfuerzo, no se
desarrolla en el vacío sino que se ve influenciado también por las condiciones
materiales en que se desenvuelve. Esto se hizo todavía más evidente entre fines
de 2017 y comienzos de 2018, debido a problemas edilicios que amenazaban
afectar el inicio del siguiente ciclo lectivo.
Dos situaciones problemáticas se plantearon: una en la sede
parroquial donde también funciona el Instituto, y otra en el Jardín de Infantes
“Belén 3” .
En la sede parroquial se había percibido desde hace un par de años
un problema de movimiento de las columnas en el edificio del templo, que se
manifestaba en forma de rajaduras cada vez mayores en las paredes. Esto
afectaba a toda la edificación que comprende el templo, una de las aulas, la
casa de los sacerdotes y las oficinas de secretaría parroquial. Luego surgió un
problema en el otro cuerpo de edificios, más concretamente debajo de la oficina
de Dirección, a causa de la rotura de caños subterráneos y problemas en la
cámara.
Ante esto el Consejo Económico intervino: realizó pruebas
hidráulicas en la zona de los baños y trajeron un arquitecto y un ingeniero
para que brindaran su asesoramiento. Luego comenzaron los trabajos: los caños
viejos y rotos fueron reemplazados por otros nuevos y más grandes (de 160 mm ) y fue construida una
sub-cámara de inspección visual, también bajo tierra. La obra buscaba que los
caños estuvieran más alejados de la zona de cimientos de los edificios.
La zanja en la que se efectuaban los trabajos estuvo abierta incluso
a comienzos de marzo, lo cual obligó a retrasar el inicio del ciclo lectivo
durante dos días. Finalmente las obras fueron terminadas y no se han detectado
nuevos problemas de rajaduras.
El otro caso del que hablamos es el jardín de infantes Belén 3, que
funciona desde 1999 en la calle Vicente Forestieri frente a Tuclame. Este edificio
se había ido deteriorando con el paso del tiempo y en diciembre de 2017 el
equipo directivo decidió que no era apto para que fuera utilizado, por el
riesgo que suponía para los niños y las maestras jardineras. Esto planteaba la
duda acerca del lugar adonde podría mudarse este jardín de infantes para
iniciar el ciclo lectivo 2018.
Jardín "Belén 3" en la calle Vicente Forestieri (imagen de Google Maps) |
El equipo directivo firmó un convenio con la Facultad de Arquitectura
de la Universidad Nacional
de Córdoba y por esta razón vino un arquitecto con alumnos de esa carrera a ver
el edificio, y luego presentaron un proyecto para construir un nuevo jardín en
el mismo terreno, en etapas y construyendo estructuras nuevas a medida que se
demolían las viejas. Aunque bueno, el proyecto no era viable en el corto plazo,
pues no se podría realizar a tiempo para marzo.
Entonces se pusieron a la búsqueda de un edificio que permitiera
mudar temporalmente el Jardín “Belén 3”
y encontraron uno que pertenece a la asociación “Damas Salesianas”, en la misma
zona (un requisito importante para poder garantizar la concurrencia de los
niños).
Este edificio no estaba en buenas condiciones, y fue necesario
realizar importantes trabajos para ponerlo en condiciones: desde sacar las
telarañas y cortar los yuyos del patio hasta cambiar la instalación eléctrica y
sanitaria. Lo mas preocupante era el tema costos, ya la escuela no tenía el
dinero necesario. Ante esto los directivos se pusieron en manos de Dios y
buscaron gente que quisiera ayudar. Consiguieron el aporte de dos empresas: una
entregaba generosamente materiales y otra la mano de obra.
Se usaron elementos del “viejo” Belén 3, como el tanque de agua y
las aberturas, y gracias a Dios se consiguió una donación de pintura. Luego
comenzó la tarea de pintar y terminar los arreglos, ante lo cual se sumaron
grupos scout integrantes por jóvenes de otros barrios, gente de la comunidad
parroquial, docentes, alumnos, todos trabajando mancomunadamente. La
convocatoria a través de las redes sociales demostró ser efectiva.
Varias imágenes del trabajo mancomunado para poner a punto el lugar. |
Fernando Dutari, representante legal del Instituto, dice al
respecto: “Fue una experiencia hermosa de compartir, de crecer y de ver la
presencia providente de nuestro Señor que estuvo ahí haciendo el milagro en
esta casa para los niños del Belén”.
Finalmente, el lunes 26 de marzo el “Belén 3” abrió sus puertas y en una
hermosa ceremonia inauguró su nueva ubicación.
Misión cumplida. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario